El pasado viernes, el Centro de Impulso Productivo y Social (CIPS) vivió una jornada especial de celebración y reconocimiento con la entrega de certificados a los alumnos que completaron los talleres durante el año y la realización de una feria de muestras, donde se expusieron los trabajos y productos elaborados en las distintas capacitaciones.
Este programa municipal, resultado del esfuerzo conjunto entre la Secretaría de Desarrollo Social y la Subsecretaría de Producción y Empleo tiene como objetivo brindar herramientas prácticas y teóricas a quienes buscan capacitarse en oficios con impacto laboral. Entre los talleres dictados este año se incluyeron: herrería, carpintería, costura, jardinería, peluquería y cocina, todos ellos orientados a promover el aprendizaje y la autogestión de los participantes.
La jornada fue un reflejo del impacto positivo que el CIPS tiene en la comunidad, no solo como espacio de formación, sino como motor de inclusión social y desarrollo económico. Se destacó el esfuerzo económico que implica para el Municipio la inversión en el espacio, los insumos y la maquinaria necesaria para el funcionamiento de cada taller. Esta apuesta reafirma el compromiso de la gestión municipal con la generación de oportunidades para los vecinos.
Además de la entrega de certificados, los alumnos tuvieron la posibilidad de mostrar los resultados de su trabajo a través de la feria, que reunió productos de excelente calidad como, por ejemplo, muebles, textiles, arreglos de jardinería y delicias gastronómicas.
El Municipio felicita a todos los alumnos por su dedicación y esfuerzo a lo largo del año y agradece a los profesores, coordinadores y familias que acompañaron este proyecto, consolidando al Centro de Impulso Productivo y Social como un espacio fundamental para la formación y el progreso.